domingo, 24 de junio de 2012

2cm from your breath


Come to my bed, dance with me. I wanna feel the experience of your breath on my skin and notice how your eyes are stuck in my soul again and again. Nothing would like more you lose with me in my sheets and see your body wake up next to mine when the sun bring us back to reality. Be my sins confidant. Turn me on again. Hold my hand while we walked down the street of lust, don't let me go anywhere else. Let's go up to the starts tonight. Put the tips of your fingers on my back over and over. Share with me the soft taste of your touch. Don't separate your lips of my lips, because I want to sleep...2cm of your breath.

lunes, 18 de junio de 2012


Conversations with an absent God.


Looking at the sky, praying to an absent God.Shaping the clouds, trying to recover the lost faith. No sign of there above, it is easier to believe in the ravages that leaves the devil.

And while 6.984.895.594 soldiers without weapons continue to struggle in a war by losing, we continue, without news of God.                                                                                         

miércoles, 10 de agosto de 2011

Se acabó el recreo

Felicidad; palabra cargada de ilusión, deseos, sueños, esperanzas... yo prefiero la locura, no es de plástico, es real.

La magia con la que vivimos cuando somos pequeños se rompe en algún momento y entonces nada vuelve a ser lo mismo. Ojala hubiese caído fulminada en esa herida, entonces quizá hubiera tenido oportunidad de empezar a creer otra vez en todo en lo que ahora no creo.
Me gustaría volver a encontrar los polvos de hada mágicos de los que un día estuve convencida que existían.
Ninguno nos confundíamos cuando decíamos que no queríamos crecer, cuanta razón teníamos... Palabras cargadas de sabiduría inocente, y eso que aún ni vislumbrábamos un ápice de lo que nos esperaba al otro lado de nuestra habitación de colores y purpurina. ¿Dónde está ese lugar ahora? Tristemente languidece en una mansión oscura y fría esperando que nadie lo encuentre, pues es donde residen atrapadas nuestras fantasías y las fantasías, son de niños. O eso dicen las bocas más cobardes. Allí llevaron secuestradas nuestras ilusiones. Las amordazaron, las encerraron, y tiraron la llave al pozo de los deseos, donde poco a poco la enterramos con pesadas monedas cargadas de ambición. En ambición se transformaron nuestros sueños.
Los monstruos que nos atemorizaban de noche ahora lo hacen a todas horas, y no desaparecen al encender la luz. La realidad supera los juegos. La imaginación queda a un lado y los prejuicios crean escuela. Se rompió la cuerda y se pinchó la pelota.



Niños, se acabó el recreo.

martes, 9 de agosto de 2011

No me gustaría ser otra chica del montón

No creo que el blanco sea el color que debería llevar hasta un altar. No quiero pertenecer a la secta de mujeres desquiciadas por encontrar su “vestido ideal”. Me preocuparía bastante formar parte de aquellas que se obsesionan más por organizar el día perfecto, ese que será “el día más feliz e importante”, que por construir una vida al lado de la persona que quieres. No quiero ser de las que se desilusionan porque su dedo anular no pesa lo suficiente. Me apuesto lo que quieras a que aquella que dijo “el diamante es el mejor amigo de una chica” fue encontrada muerta junto a una manada de gatos, sola; sola pero con un precioso anillo de diamantes que nadie le regalo. Mi pensamiento sobre sentirme realizada no se basa en seguir los tópicos, y mucho menos en ser corriente, o identificarme con un grupo que sigue el protocolo establecido para la mujer. No tengo previsto ser una chica del montón. Por mi parte, no voy a dar el gusto a ningún otro hombre o mujer de hablar de un sexo débil.